Muchas veces nos enteramos de nuestro embarazo, por desgracia hemos realizado algunas cosas que estando en cinta no se debería hacer. Como intervenciones quirúrgicas, radiografías, o el consumo de algunos fármacos, a continuación algunas situaciones:
Me he tomado una radiografía antes de saber que estaba embarazada
Se ha tomado una placa, o dos, en una zona diferente al útero, quédese tranquila porque en estos casos los riesgos son mínimos. Si se ha tenido que realizar muchas radiografías en el abdomen, por ejemplo para un estudio de riñones, seguramente vuestro obstetra, tenga que revisar la situación y evaluar a que altura del embarazo fueron realizadas estas radiografías.
Que debo hacer si me tienen que operar
Si llagada la situación una enfermedad requiere una operación urgente no habría porque demorarla, La anestesia no suele afectar al bebé, sobre todo si ya ha pasado el período de formación de sus órganos. Ahora bien, una vez realizada la operación debemos estar muy atentas a la aparición de posibles contracciones, cosa que de ser necesario nuestro obstetra, indique medicación para relajar el útero y así evitar un parto prematuro.
Si se está transitando el primer trimestre y la cirugía no es urgente, se suele esperar hasta el segundo, si por contrario, se esta cerca de la fecha de parto, el médico decidirá si es mejor inducir al parto y luego realizar la cirugía, dependiendo de los riesgos tanto para el bebé, como para la madre. De todos modos las operaciones durante el embarazo son muy poco frecuentes.
No sabía que estaba embarazada y he ingerido fármacos.
En principio hay muy pocos fármacos que una embarazada pueda tomar por su cuenta y que seriamente provoquen malformaciones en el niño que se está gestando. En el caso de que tenga que tomar algún tipo de medicación, específica, el obstetra le indicará cuales son los riesgos y beneficios, luego de evaluar que es lo mejor para ambos.
Foto: Gracias a Daquella manera