Cuando tenemos poco tiempo para usar nuestro bikini y vernos espectaculares llegamos al punto del desespero y no sabemos que hacer para que no se nos vea mucho la mala figura. Para esos días te traigo cuatro trucos.
- Tres días antes corta todos los carbohidratos, a excepción de los vegetales feculentos y las frutas. De esa manera te desharás de toda el agua extra que podamos tener en nuestro cuerpo, lo que puede hacernos reducir de peso y parecer más esbeltas. También evita los excesos de sal, que tiene el mismo efecto de retener agua. Limita tu ingesta diaria de sodio a 2.300 miligramos.
- Dos días antes intenta dormir adecuadamente: La cantidad de sueño puede afectar las funciones de las hormonas que regulan el apetito y el metabolismo. Dormir poco puede causar que los niveles de esas hormonas fluctúen, lo que hace que nos sintamos más hambrientas y menos capaces de decir cuando estamos llenas. Debes intentar dormir por lo menos siete horas en la noche y de esa manera tendrás menos ganas de comer alimentos que no son adecuados.
- Evita vegetales como el brócoli, repollo y coles de Bruselas, que son muy altos en fibra y difíciles de digerir, lo que significa que nos vamos a sentir infladas y flatulentas. Esos vegetales también contienen sulfuro, así que cuando están muy maduros tienen un olor terrible.
- Un día antes no debes ingerir bebidas gaseosas, porque cuando las bebemos consumimos aire extra, lo que nos hace sentir con el vientre inflamado cada vez que terminamos un vaso. Así que es mejor dejar las bebidas gaseosas y las sales de frutas y tomar mucha agua.
Foto: Markiza