Ya han pasado meses que estábamos esperando el momento de volver a sacar nuestras sandalias del clóset para disfrutar de lo refrescante y glamuroso que es vestirlas en estos climas más cálidos. Después de meses de andar con medias y botas para la lluvia ha llegado nuevamente la hora de dejar nuestros pies al aire libre, el único problema es que no les hemos prestado mucha atención desde el año pasado.
Así que antes de ponerte tus sandalias o si deseas mejorar la apariencia de tus pies, te traigo algunos consejos para hacerte una pedicura en casa para poder exponer tus pies sin ningún reparo.
Lo primero que debes hacer es mojar un pedazo de algodón en un removedor de esmalte y quitarte todo ese esmalte que tienes en tus uñas desde el año pasado. Después debes cortarte las uñas de forma derecha, porque si intentas cortar también los lados pones tus dedos en un serio riesgo de que la uña te crezca incrustada en la piel, lo cual es extremadamente doloroso. Si quieres darle una apariencia más redonda a tus uñas, hazlo con una lima, que es mucho mejor.
Luego llena un cubo con agua caliente y ponle media taza de sal de uvas, frutas o Epsom, lo que te ayuda a relajar la tensión muscular y a desinflamar los pies cansado. Y si en realidad te quieres mimar un poco, puedes ponerle algunas sales para baño con esencias que te hagan relajar. Después de cinco minutos, cuando ya estés suaves, toma una piedra pómez o una lija para los pies y úsala para suavizar aquellos puntos ásperos de tus pies, como los talones y los lados de los dedos.
Después utiliza un separador de dedos para prepararlos para el esmalte. Aplica una capa de base, dos capas de color y una capa de brillo. Luego puedes tomar un bastoncillo de algodón con removedor de esmalte para quitar lo que te sobre. Recuerda que debes dejar secar esto completamente antes de ponerte unos zapatos, lo que pueden ser varias horas. En tres días aplica una nueva capa de color para mantenerlo fresco hasta que sea hora de hacer todo nuevamente.
Foto: Average Jane