Sería un error decir que la última cosa en la que pensamos al comprar una prenda, es el escote. Sin embargo, dentro de las consideraciones que tienes presentes al elegirlas (entre las que seguro está el largo del escote) tal vez haya algunas de suma importancia en las que no habías reparado, como el efecto que el escote elegido tendrá sobre la forma de tu rostro.
El primer paso es calcular la altura a la que llegaría, incluso antes de averiguarlo en el probador.
Además de que puedes sentirte incomoda si el escote es muy generoso o si deja descubierta cierta zona de tu pecho que no deseas se muestre, debes considerar que algunos necesitan lencería de formas o tirantes específicos.
En cuanto al beneficio que puede significar para tu apariencia, es importante que sepas que si tu cuello y rostro son delgados y largos, el propicio es el escote redondo, mientras que el cuello en pico o «v» resulta acertado para aquellos cuellos cortos y/o anchos.
Los cuellos altos o cuellos de tortuga pueden hacerte lucir anticuada o a tus mejillas demasiado redondas, además de que son casi exclusivos para temporadas de clima frío, sobretodo si están hechos de telas poco permeables.
Foto: esmas, y miss compras
