Las fibras son parte esencial de una dieta saludable, más allá de su capacidad de regularizar el transito intestinal, así como también de ayudar a disminuir el riesgo de contraer diabetes o enfermedades cardíacas.
Para qué sirven las fibras
A diferencia de los demás componentes de los alimentos, como las grasas, los hidratos de carbono y las proteínas, las fibras no son digeridas por le organismo y pasan intactas al estómago y los intestinos hasta llegar al colon.
Las fibras son necesarias por sus múltiples beneficios, no solo para combatir el estreñimiento, sino además por su capacidad para prevenir enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.
Se deben consumir al menos unos 30 gramos de la ingestión diaria de fibra y lo podemos asegurar incluyendo en nuestra dieta frutas y verduras en lo posible crudas y con cáscara, así mismo se suele recomendar comenzar con consumos moderados de fibras en la dieta e ir gradualmente aumentando las porciones para prevenir posibles riesgos de intolerancia en aquellas personas que no se encuentran acostumbradas o padecen de intolerancia a estos tipos de alimentos.
