Para estimular su olfato, podemos embeber con un poco de perfume (poco, reiteramos) de diferentes fragancias, en un pañuelo, y luego de olfatearlos nosotros se lo acercamos para que poco a poco vaya reconociendo olores, para culminar exageramos un poco con los gestos cuando olemos, para que él copie nuestros gestos, y demostramos si la fragancia nos agrada o no.
Por lo general a partir de los 5 meses los bebés ya se sonríen casi todo el tiempo y les encanta jugar con su imagen cuando la descubren en algún espejo.
Para aprovechar mejor este tipo de descubrimiento lo podemos estimular, parándonos frente del espejo los dos, y mirando hacia el mismo lo animamos para que comience a mover todas sus partes del cuerpo, mientras las vamos nombrando, lo incentivamos preguntando ¿Donde están las manitas? ¿Y los piecitos?, moviéndonos, para que él mismo haga copie nuestros movimientos mientras se sonríe y se ve reflejado en el espejo.
En el caso que el niño señale sus manos o pies en el espejo, jugando tomamos las de él y le señalamos que no están allí, sino en el mismo.
Foto: Gracias a lindsayshaver