Los niños cuando les proporcionamos diferentes tipos de lápices distintos en sus grosores y trazos , realizan figuras, líneas rectas y curvas, afianzando de esta manera la forma de sus trazos y por lo tanto mejorando su motricidad.
Que queremos decir con ello, que es muy importante que el niño desde temprana edad se le permita dibujar con diferentes pinturas, ya que son los primeros pasos hacia el desarrollo motriz que luego les permitirá aprender a escribir.
De esta forma poco a poco irán aprendiendo a respetar el espacio que tiene en la hoja de trabajo, colocando objetos adecuadamente, y dándoles una proporción acorde al tamaño de las horas que le damos para dibujar. Mediante los dibujos ellos ejercitan muchas cosas, sobre todo la intencionalidad de aquello que quieren transmitir.
Al principio puedes comenzar enseñándole a dibujar jugando con sus manos, haciendo figuras representativas, a las que luego más adelante podrás darles un itinerario. También puedes proveerle de esponjas para que realicen mediante manchas pinturas que representen algunas figuras, que con el tiempo irán tomando una forma más real a medida que ellos avanzan en sus aprendizajes, las yemas de los dedos, son imprescindibles para que le den terminación a las mismas y de paso van practicando sus habilidades para manejar mejor las manos.
Las temperas, las acuarelas y los lápices y crayones, son los mejores amigos, para que tu hijo se exprese y poco a poco adquiera los aprendizajes motrices que luego le permitirán realizar una correcta escritura.
Foto: Gracias a tiffanywashko