El metabolismo de una futura madre va experimentando varios cambios, sobre todo con los aportes de glucosa, que en estos momentos se necesita un poco más que cuando no se está gestando.
El ser en formación que llevamos dentro nuestro necesita un aporte de glucosa, las 24 horas del día, inclusive durante la noche, por eso se recomienda a una futura madre que consuma alimentos ricos en nutrientes y que lo haga en 3 comidas básicas y 3 colaciones o tentempiés. Te preguntarás el porque de la importancia de la glucosa.
Porque la energía que se necesita habitualmente para vivir en el organismo se traduce químicamente como esta sustancia. Absolutamente todo el organismo, los músculos, el cerebro, y por supuesto nuestro pequeño bebé, se nutren de la misma y se obtiene a través de todos aquellos alimentos que incorporamos en nuestra dieta diaria, especialmente de los hidratos de carbono de absorción lenta. Los mismos están presentes en frutas, cereales, las pastas y las legumbres.
Si nos quedamos sin reservas o nos privamos de consumir alimentos, es cuando aparecen las conocidas bajas de azúcar en sangre o hipoglucemias, que físicamente se traducen en el embarazo a forma de mareos, náuseas, malestares, debilidad, mal humor, y terminamos adquiréndolas de azúcares refinados de rápida absorción, como son las golosinas, los chocolates o los dulces, por eso se hace una necesaria alimentación equilibrada a lo largo del día, para que no falten reservas de glucosa y nuestro embarazo se desarrolle en óptimas condiciones.
Foto: Gracias a CamilleRynd
