Junto a la cocina, el baño es uno de los cuartos que puede representar mayores peligros en la casa para los niños entre los dos y los cuatro años. Y es que precisamente en esas edades los chicos son mas curiosos, quieren estudiarlo todo y mirarlo todo, y quieren saber como funciona todo. Sin embargo, existen consejos fáciles para mantener a tu hijo alejado del peligro.
Lo primero es que mantengas este cuarto cerrado para que tu hijo no pueda entrar allí si no está acompañado, poniendo un pasado en lo alto o un seguro a prueba de niños. También intenta mantener la tapa del inodoro abajo e instala un seguro para prevenir que la levante. Los niños pequeños además de ser curiosos tienen muy poca coordinación, por lo que podría llegar a ser peligroso que se asomen a curiosear y pierdan el equilibrio cayendo de cabeza allí dentro.
Asegúrate de desconectar el secador de cabello y cualquier otro elemento que utilicen la electricidad para producir calor y ponlo lejos del alcance de tu hijo para que prevengas que se queme. También mantén todos los cosméticos, los medicamentos y las medicinas, incluyendo el enjuague bucal, en un gabinete alto con seguro porque podrían ser muy peligrosos para tu pequeño.
Pon un tapete de caucho antideslizante dentro de la bañera y otro en la parte de afuera para prevenir caídas, sin embargo enseña a tu hijo a quedarse sentado en la bañera en todo momento y si es del tipo activo posiblemente tendrás que repetírselo muchas veces, pero vale la pena por su seguridad. También mantén alejado de su alcance las afeitadoras, pinzas, tijeras y otros elementos con los que se pueda cortar o herir.
Foto: drcorneilus