Muchas mujeres deciden hacer ejercicio tomando clases fuertes de baile que incluyen ritmos como el hip hop y el jazz. Sin embargo, cuando quedan en embarazo no están seguras si pueden seguir con esa clase de rutinas de ejercicio, porque sin duda es una muy buena forma de hacer actividad física, pero también se cree que puede ser demasiado intenso para una mujer que está en ese estado. A continuación la opinión de los expertos en esta materia.
En general, cuando estás embarazada puedes seguir haciendo el mismo tipo de ejercicio que estabas haciendo antes, siempre y cuando hagas algunas modificaciones y desde que no haya algo en tu condición física que te ponga en riesgo o a tu bebé haciendo esas actividad. Para tomar una decisión informada sobre si debes quedarte en tu clase, necesitas entender los cambios en la función cardiaca y en el metabolismo que viene con el embarazo.
Temprano en el embarazo, la cantidad de sangre que circula por tu corazón aumenta, hasta que se nivela durante el tercer trimestre entre un treinta y un cincuenta por ciento sobre lo normal. Tu corazón tiene que trabajar más fuerte para hacer circular esa cantidad extra de sangre, por lo que cualquier ejercicio aeróbico que hagas en este estado te costará más trabajo que antes, sin importar la intensidad.
El ritmo cardiaco también se eleva durante el embarazo, debido al incremento del volumen de la sangre, así que después de hacer ejercicio te tomará más tiempo que tu corazón vuelva a sus latidos normales. Los riesgos de dolores musculares o cualquier lesión son más altos, debido a que la misma hormona del embarazo que ayuda el útero a expandirse, también debilita los tejidos de conexión del cuerpo, por lo que saltar, hacer movimientos bruscos o cambiar de dirección abruptamente no es una buena idea.
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