Es muy común que los niños se hagan heridas jugando, ya que están afuera corriendo y saltando en lugares que les pueden causar heridas y es lo lógico cuando se es pequeño. Sin embargo, algunas de estas heridas son un poco más graves de lo que esperábamos, en especial los cortes que pueden llegar a ser muy profundos, por lo que se debe ir al doctor para que tome las medidas correspondientes.
Dependiendo de lo que haya causado el corte en tu hijo, el doctor puede mandarle a hacerse unas radiografías de la zona para asegurarse de que nada se haya quedado dentro, porque si algo quedó debe ser removido. Para hacer los puntos de sutura, el doctor pondrá un anestésico local en el área para dormirla y si tu hijo siente dolor o no le gustan las inyecciones, puede poner un anestésico tópico para dormir la piel primero.
Después el doctor continuará limpiando el área hasta remover todo lo que se encuentre dentro del corte y pondrá los puntos de sutura. Si estos se ponen en un área que pueda verse afectada por el movimiento, como por ejemplo en la rodilla o en un codo, podría ponerle a tu hijo una escayola para inmovilizar el área y que así la herida no se vuelva a abrir por el movimiento.
En la actualidad existen otros métodos para cerrar heridas como un pegante para piel que se encarga de juntar las dos partes de una herida abierta. Este método es muy fácil y sin dolor, además después de siete días se cae solo y así se evitan las molestias de ir a remover los puntos. Sin embargo, este pegante sólo se aplica en ciertas partes y con heridas que sean de líneas rectas por lo que el médico decidirá si es bueno para el caso o no. Después, el doctor puede recetar antibióticos para prevenir las infecciones y si el corte fue hecho por un objeto sucio u oxidado, puede revisar que tenga la vacuna contra el tétano o se la pondrá de inmediato.
Foto: macieklew