Casi todas las parejas tienen temas críticos que cada vez que se sientan a compartir un momento sale y re sale a la luz, sobre todo en los mementos de discusión. La obsesión en la pareja sobre esos temas suele degradar la relación a puntos críticos.
Temas como los siguientes representan gran parte de la obsesión en la pareja
El dinero, las relaciones personales, la familia política, la falta de cooperación, son constantes reproches, que ante una pequeña pelea, reflotan y aparecen de la nada, Cada miembro de la pareja seguramente conocerá su propio talón de Aquiles, pero sacar estos problemas a la luz solamente consigue poner las cosas más tensas y una pequeña discusión terminan haciéndose enorme y no se llega de ninguna forma a un común acuerdo.
Se hace importante hacer un trabajo interior, para eliminar estos temas de la mente se debe ser objetivo sobre lo que se está discutiendo, no pensar estos temas, ni mencionarlos, ni profundizar, ya que la única manera que deje de ser un problema, será cuando ya no tenga más protagonismo.
Revivirlo todo el tiempo es golpearse y lastimar constantemente a la pareja, la clave está en discutir sobre cosas concretas, tomar decisiones y archivar aquellas viejas discusiones, ya que es la única manera de crecer juntos encarar nuevos proyectos y convivir en armonía, con la persona que elegimos de compañero.