Las tareas de la limpieza pueden ser algo agobiantes y junto al ordenar todo no son las cosas que más nos guste hacer en nuestra casa. Sin embargo, son cosas que no podemos evitar por más que queramos porque el desorden tampoco es algo muy agradable para vivir a toda hora junto a él. Pero existen varios trucos que pueden ayudarnos, así sea psicológicamente, a hacer estos deberes de una mejor forma.
– Prueba una nueva esencia: Si no quieres intentar todo un nuevo producto, intenta una nueva esencia. Las esencias hacen una gran diferencia en nuestras actitudes y en nuestro humor. Intenta una nueva y podrías descubrirte con más emoción y motivación para hacer los deberes. Asegúrate de no combinar muchas esencias diferentes, porque pueden causar alguna irritación para los invitados o los miembros de la familia. Cambia de esencias lentamente hasta que encuentres la adecuada para tu familia.
– Recorta el desorden: Incluso si sólo encuentras una pequeña área para liberarte del desorden, ese sentimiento de ver objetos inservibles salir de nuestra casa es muy liberador y llena de energía. Empezar limpiando una pequeña área puede ayuda a que te motives para después seguir con proyectos más grandes. Asegúrate de limitarte sólo a pequeñas áreas porque si intentas hacerlo en toda tu casa el mismo día, podrías acabar aún con más desorden del que tenías y así ya no tendrás mucha motivación para continuar.
– Reacomoda una habitación: Esta es una muy buena manera de crear una nueva perspectiva y así motivarte a limpiar y a organizar. Reacomoda los muebles, las piezas de arte, las alfombras y los objetos decorativos. Además cambiar una habitación puede brindarte una motivación extra para mantenerla limpia y sin tanto desorden. Pero debes estar preparado para una buena cantidad de trabajo, porque te sorprendería la cantidad de desorden que se descubre cada vez que se mueve algo en el hogar.
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