Normalmente cuando nos mudamos a una nueva casa o apartamento encontramos con una decoración muy plana y simple, en especial en la parte de la cocina. Usualmente los gabinetes y estanterías son de color blanco o crema, las partes de encima de los mesones son blancas o negras y las decoraciones innovadoras son mínimas. Todo este ambiente, que puede llegar a ser aburrido, es fácil de cambiar simplemente añadiendo un poco de color y de imaginación.
Un cambio que es muy sencillo de hacer, y que afortunadamente no te cuesta una fortuna, es cambiar las baldosas que están en las paredes debajo de los gabinetes por algo un poco más hermoso y con la misma función, es decir que se pueda lavar fácilmente. Puedes comprar de aquellas baldosas que tienen un poco más de texturas y de un color un poco más oscuro, como el ladrillo.
Si así lo quieres, y puedes pagarlo, puedes hacer un bonito cambio al reemplazar la isla de tu cocina. La mayoría están hechas en piedra y en baldosa, por lo que te recomiendo cambiarla por una recubierta de madera. También si quieres puedes hacerla un poco más alta para poner allí lugar para guardar vinos y poner algunos cajones para que tengas más espacio de almacenamiento.
También si deseas hacer que el espacio parezca un poco más moderno y dejar atrás lo que dejaron los habitantes antiguos, puedes reemplazar ciertos electrodomésticos que no te cuestan mucho, como el horno de gas que está debajo de la estufa, poner una vitrocerámica y hasta cambiar el horno microondas por uno nuevo, así sentirás que tienes toda la cocina nueva.