Los ventiladores de techo de nuestras casas poco a poco van recogiendo todo el polvo, bichos que se quedan allí, grasa que sale de las cocinas y telarañas, por lo que poco a poco van cambiando de color, adquiriendo manchas y viéndose como el peor elemento decorativo de nuestro espacio. Limpiarlos y mantenerlos así no es fácil, pero es posible con unos simples consejos.
Un consejo muy importante es para remover el polvo que se ubica en la parte de arriba de las aspas, como las telarañas, el polvo y los bichos como pequeños mosquitos que allí se quedan. Para que no utilices un plumero y que corras el riesgo de que todo lo que está allí encima se caiga sobre ti, te recomiendo tomar una funda de almohada que ya no utilices, la pones encima de cada aspa y la suciedad se quedará allí dentro para que después la tires a la basura.
Cuando ya hayas acabado cada una de las aspas con la funda de la almohada y si todavía queda polvo, puedes continuar con el plumero porque ya será mucho menos el polvo y la suciedad que quede allí arriba, además puedes deshacerte así del polvo que queda en la parte redonda de en medio que no fue afectado por la limpieza de las aspas, hasta que quede todo limpio.
Si después quieres quitar las manchas que hayan quedado, te recomiendo utilizar una esponja y un jabón suave con agua, que vas a poner delicadamente para no rayar las aspas y luego lo retiras con un paño húmedo. Puedes también utilizar otros productos quitamanchas para el mobiliario, pero asegúrate de que no sean muy fuertes y puedan arruinar el brillo o los acabados que tenga tu ventilador.