El orden es importante en todos los rincones de la casa, pero el cuarto de baño requiere una atención especial en este aspecto, pues se trata de un espacio eminentemente funcional. En él llevamos a cabo las rutinas diarias de limpieza y belleza por lo que necesitamos que cada cosa esté en su lugar. Un armario es una excelente herramienta para lograr dicho objetivo además de que aporta un toque importante en la decoración.
Los baños son en parte, un spa privado y, en parte, un lugar de parada obligatoria un minuto antes de salir hacia cualquier lugar. Nuestro almacenaje de baño permite ordenar las cosas para que todo el mundo encuentre fácilmente sus pertenencias, incluso con las prisas matutinas.
- Los armarios en forma de columnas altos y estrechos son una opción para baños con mucho o con poco espacio. Su tamaño es reducido pero al ser bastante altos tienen buena capacidad.
Qué guardar en los armarios de baño
¿Qué tipo de objetos guardas en el baño? ¿Toallas, productos de belleza, papel higiénico? Aprovecha el espacio que te brinda el armario para que todo esté en perfecto orden.
Blancos. Las toallas, el albornoz de baño y hasta las chanclas que usas para salir del baño pueden quedar acomodadas en las estanterías de un armario. Si colocas papel higiénico perfumado o jabones cerca de ellas, mantendrán un aroma fresco.
Productos e instrumentos de limpieza. Si guardas balletas, limpiadores y otros utensilios, tu baño se mantendrá siempre limpio y con un aroma agradable.
Lo necesario para tu cuidado personal. En el baño podemos arreglar nuestro cabello, afeitarnos, aplicarnos cosméticos y hasta arreglarnos las uñas. Tu secadora de pelo, tus cosméticos, tus cremas humectantes pueden quedar perfectamente organizadas en el armario.
Jabón y shampú. Siempre es bueno ser precavidos. Además de los productos de limpieza personal que tienes en la tina o la ducha, vale la pena tener algunos extras en el armario.
En fin, los armarios para baños son muy útiles, tanto como para guardar cosas como para rellenar espacios vacíos y aprovechar todos los rincones, puedes dirigirte a una tienda y comprar sus diseños o en una maderera comprar todas las piezas del armario y armarlo tu mismo.
Es un proceso muy sencillo que no requiere de mucho conocimiento en carpintería o en otros tipos de trabajos similares, por lo que cualquier persona puede hacerlo.
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