Por lo general la anemia ferropénica es causada a menudo por una falta de hierro, un mineral que se encuentra en las células de nuestro organismo, muchas veces por pérdidas excesivas de sangre, en las mujeres embarazadas por un incremento en la demanda de éste mineral o por una mala síntesis de los glóbulos rojos.
Como en todos los casos de anemias, la alimentación juega un rol fundamental en los pacientes, y es recomendable que ingieran carnes rojas y blancas, legumbres, vísceras, hortalizas de color verde que contienen altas cantidades de hierro, cereales y lácteos modificados y fortificados con éste mineral.
Deben evitar consumir, té, café, mate, sobre todo luego de las comidas, ya que dificultan la absorción correcta del hierro, así como también el consumo de bebidas alcohólicas.
Pueden consumir moderadamente, alimentos ricos en fibra, ya que las fibras encapsulan al hierro en los intestinos y no permiten absorberlo, antiácidos, lácteos en exceso, soja, y cereales, ya que muchos de éstos alimentos pueden interferir en la absorción del mineral, sobre todo si se consumen combinados con alimentos ricos en hierro.
Ante la menor duda no deje de consultar con su especialista de confianza.
Foto: Gracias a Ollie Crafoord
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