Durante los primeros años de la vida (de 3 a 6 años) es cuando debemos marcar las pautas acerca de los hábitos alimentarios, que luego tendrán el resto de su vida. Es muy importante que los niños, a medida vayan pasando los años, coman de todo, teniendo una dieta variada podrá atender las necesidades de vitaminas y energía del organismo.
Alimentación en niños
Enseñarles a los pequeños la importancia del desayuno es trascendental, suele pasar que con el apuro de la mañana los chicos salgan para el colegio casi sin ingerir nada, y eso no es aconsejable. Tampoco se recomienda que ingieran muchas golosinas, en primer lugar porque le quitará el hambre a la hora de sentarse a comer y en segundo lugar porque mediante ellas estamos ingiriendo demasiada cantidad de azúcar.
La dieta de los pequeños debe ser rica en proteínas de buena calidad (carnes, pescado, lácteos, huevos). Trata de evitar los refrescos, sobre todo a la hora de comer.
Los niños de 7 a 12 años de edad se encuentran en una etapa donde el aporte energético debe ser importante, también es importante cuidar el peso de los niños. No deben comer demasiados dulces, refrescos, quesos con mucha grasa o alimentos demasiado salados.
Intenta darle variedad de lácteos, frutas, ensaladas, verduras, carne, pescado, huevos, legumbres, arroz, pastas.
A partir de los 13 años y hasta los 16 años de edad los pequeños suelen crecer mucho y rápidamente. Al finalizar esta etapa ya tendrán la altura definitiva. Por eso es muy importante que se desarrollen bien. Como padres debemos incentivarlos a realizar una vida activa, dejando de lado un poco la vida sedentaria y haciendo algún deporte que le guste.
A esta edad ellos entenderán lo importante que es llevar adelante una dieta variada, donde se incluyan frutas, verduras, carnes, pescado, lácteos, cereales, evitando la comida ‘basura’. Es preferible evitar los alimentos fritos.