La técnica de hidroterapia hoy por hoy está reconocida mundialmente como un método curativo que consiste en la aplicación de agua corriente caliente, templada o fría en determinadas partes del cuerpo para mejorar la circulación y el aspecto general del organismo.
Se la puede aplicar sobre brazos, pecho, espalda, piernas y muslos, pantorrillas, y en la parte inferior del cuerpo, cada uno tiene diferentes efectos y funciones.
- Sobre los brazos: se aplica desde la mano hasta el hombro y sus efectos terapéuticos en frío son relajación cerebral, en caliente relajantes contra cefaleas, e intercalados suelen aplicarse para combatir crisis asmáticas.
- Sobre el pecho: en frío no está indicado en esta zona, en caliente se aplican para enfermedades del tipo reumáticas, respiratorias o de fibrosos pulmonar.
- Sobre la espalda: en frío tonifica la respiración y el corazón en personas asmáticas, obesas, y refuerza la musculatura, en caliente, activa toda la circulación sanguínea periférica, relaja el sistema nervioso y muscular.
- Sobre las piernas y muslos: sus efectos terapéuticos fríos son beneficiosos para las varices, reumatismo muscular, estreñimiento, trastornos circulatorios y nerviosos. En caliente sirven para combatir jaquecas, hemorroides, trastornos urogenitales, y alternando chorros de agua fría y caliente es muy beneficioso para la ciática y combatir problemas circulatorios que mantienen las extremidades frías.
Foto: Gracias a doncan311