El embarazo es toda una aventura llena de hormonas elevadas, de antojos extraordinarios y de cambio en el cuerpo que aún ni te imaginas. Y además de tener que lidiar con todo esto, seguramente ya empezaron, o están cerca de llegar, cientos de consejos que tu nunca has pedido sobre este nuevo estado en tu vida. Pero no creas todo lo que te diga, aquí te doy unas realidades sobre las creencias populares a la hora del embarazo.
– Es hora de comer de más: Seguramente ya habrás oído eso de que tienes que comer por dos. Claro que si necesitas nutrientes extra como el calcio y el hierro mientras estás en embarazo, no necesitarás calorías extra hasta el segundo trimestre, e incluso en esa etapa sólo necesitas trescientas adicionales al día, y el reto es conseguir esas calorías de comidas que construyan bebés fuertes en vez de comidas rápidas, como un cuarto de taza de nueces, un cuarto de taza de fruta deshidratada o medio sándwich de pavo.
– Necesitas carne: Si tienes un estilo más vegetariano creerás casi imposible conseguir ese hierro y proteína extra que necesitas durante el embarazo y aunque requiera un esfuerzo mayor como con cereales fortificados, espinacas cocinadas y melocotones deshidratados, entre otros. Además la vitamina C te ayuda a absorber el hierro por eso es mejor si la consumes con esos alimentos.
– Pescados: En los últimos tiempos hemos escuchado que las mujeres en embarazo y que estén lactando deben comer menos de doce onzas de pescado bajo en mercurio por lo que deben mantenerse alejadas del pez espada, el tiburón y la lubina. Pero muchas mujeres se lo toman muy en serio y dejan de comer cualquier clase de pescados, sin saber que el acido docosahexanoico y las grasas poli insaturadas del Omega 3 que aporta el pescado son esenciales en el desarrollo de los ojos y el cerebro del bebé. Así que te recomiendo comer pescado de aguas frescas como el salón, el atún, las ostras, el arenque y la trucha.
– Nutrientes que nunca has escuchado: Posiblemente ya has escuchado mucho que debes mejorar tu ingestión de calcio y hierro, pero probablemente no te han mencionado la colina, que es un nutriente importante para la salud cerebral de tu bebé. La puedes encontrar en comidas de soya, en el coliflor, en el hígado, en los huevos y en las chuletas de cerdo. La colina puede ayudar a la memoria de tu hijo y a la habilidad de aprender.
Foto: Ed Yourdon
