Cuántas veces no habremos escuchado a nuestras madres, nuestros padres, nuestros abuelos e incluso nuestros amigos diciendo que debemos comer más despacio, que consumimos nuestros alimentos muy rápido y que eso no es bueno para la salud. Pues en eso tienen razón, porque además de no ser muy bueno y hasta nos puede llevar a atorarnos, también hace que ganemos más peso.
Las personas que comen rápidamente sus comidas tienen el doble de posibilidades de ser obesos o tener sobrepeso, sin importar si están comiendo bien o mal, si consumen frutas y vegetales, si comen muchas harinas o si sólo se están comiendo una ensalada. Y según esto, sin importar si estás haciendo una dieta muy estricta y estás haciendo todo lo posible para bajar de peso, si no comes despacio eso no servirá mucho.
El problema es que cuando comes rápidamente todo lo que tienes en el plato, no le estás dando suficiente tiempo a tu cerebro para que le diga a tu cuerpo que estás lleno, así que sigues y sigues comiendo y a la hora que tu cerebro se da cuenta que estás lleno, ya te sientes a reventar y ya te has comido todo, incluso si no era necesario.
Además algunas comidas, como las comidas rápidas, son aún peores, porque tienen una mayor cantidad de calorías y grasas que estás consumiendo por completo. Un truco muy fácil para comer más despacio es masticar cada bocado por más tiempo, que es algo que seguramente has escuchado en más de una ocasión, pero que en realidad funciona. Además algunos expertos dicen que al masticar entre 20 y 30 veces cada bocado, puedes reducir calorías.
Foto: Mr.Thomas
