La esquizofrenia es una enfermedad severa del cerebro que interfiere con las funciones normales mentales y cerebrales y puede desencadenar alucinaciones, paranoia, decepciones y una falta de motivación significativa. Si no se lleva a cabo un tratamiento adecuado, esta enfermedad afecta la capacidad de pensar claramente, de interactuar apropiadamente con otras personas y de manejar las emociones.
Esta enfermedad usualmente deja a las personas discapacitadas y puede afectar profundamente distintas áreas de tu vida, por ejemplo podrías ser incapaz de volver a trabajar o de ir a la escuela o la universidad. Y por supuesto, cuando te dicen que un familiar o una persona que quieres sufre de esquizofrenia puede ser producir sentimientos de mucho temor y de profunda tristeza.
La mejor manera de mejorar tu calidad de vida cuando tienes esquizofrenia o cuando alguien con quien convives la tiene, es aprender lo más que puedas sobre esa enfermedad y seguir con mucha disciplina el tratamiento que sea propuesto por el experto en medicina. Existen muchos tipos de esquizofrenia y las clases específicas se diagnostican por los síntomas que muestran.
La clase más común de esta enfermedad es la esquizofrenia paranoica que causa que una persona tenga pensamientos llenos de miedo y escuche voces amenazantes. Lo que si debes tener claro es que la esquizofrenia no tiene nada que ver con las personalidades múltiples y no es la misma condición que el desorden de identidad disociativa, que también se llama desorden de personalidad múltiple o personalidad dividida.
Foto: B. Charles Johnson
