Cuidados ante una angina de pecho

La angina de pecho esta representada por un dolor opresivo y agudo de duraciones variables (pocos minutos o media hora) que se manifiesta en la parte izquierda del pecho, en el cuello, hombro y brazo izquierdo.

 El dolor puede responder a una obstrucción de las arterias, probablemente ocasionado por la presencia de colesterol en la sangre u otros factores que contribuyen a ello como en el caso de los fumadores, personas con estrés, hipertensión arterial, diabetes o agentes infecciosos.

Alimentos que ayudan a prevenir la angina de pecho

Hay alimentos que pueden ayudar a curar y prevenir la angina de pecho, que deberíamos tener en cuenta a la hora de alimentarnos correctamente. Consumir ajo, un diente crudo una vez al día ya que dilata las arterias coronarias y reduce la formación de embolias (obstrucción que se liberan en la sangre) y posee además efectos antibióticos contra muchos gérmenes.

La miel es otro alimento que no debe ser pasado por alto una cucharadita diaria acompañando la leche de la mañana o en cualquier momento del día. Es un buen dilatador de las arterias coronarias igual que el ajo, y mejora la sangre que es llevada hacia el corazón. Otro alimento que se suele recomendar son las pasas de uva que tienen el mismo efecto.

Existen 3 tipos de angina de pecho

1. Angina de esfuerzo: Provocada por la actividad física o por otras situaciones que implican un aumento de la necesidad de oxígeno en el corazón. Suele ser breve y desaparece al interrumpir el ejercicio o con la administración de nitroglicerina. A su vez, se clasifica en: inicial, si su antigüedad es inferior a un mes; progresiva, si ha empeorado durante el último mes en cuanto a frecuencia, intensidad, duración o nivel de esfuerzo en que aparece; estable, si sus características y la capacidad funcional del paciente no se han modificado en el último mes.
2. Angina de reposo: Se produce de manera espontánea, sin relación aparente con los cambios en el consumo de oxígeno en el corazón. Su duración es variable y en ocasiones los episodios son muy prolongados y parecen un infarto.
3. Angina mixta: Aquélla en la que coexisten la angina de esfuerzo y la de reposo, sin un claro predominio de una u otra. Tanto la angina inicial, como la de esfuerzo progresiva y la de reposo siguen formas de evolución imprevisible y su pronóstico es variable, por lo que también se agrupan bajo la denominación de angina inestable. Su tratamiento difiere considerablemente del de la angina estable. Ésta se da siempre al realizar el mismo nivel de ejercicio y la duración de las crisis es similar.La angina inestable puede ser el aviso de un infarto inminente y necesita tratamiento especial.

Antecedentes de angina inestable: Ataques frecuentes de angina de pecho no ligados a actividad física. En ocasiones se percibe de forma distinta, sin ningún patrón fijo, y se prolonga a la parte superior del abdomen, lo cual hace que se atribuya a una indigestión. Como las manifestaciones clínicas pueden ser muy variadas, es el médico, con ayuda de electrocardiogramas y análisis de laboratorio, quien tiene que hacer un diagnóstico concluyente.

Es adecuado hacer actividad física, realizar todos los días deporte (caminatas, gimnasia, natación) para reducir la posibilidad de obstrucción arterial. Evitar el consumo de grasas, eliminando de la alimentación comidas saturadas de grasas, los dulces y embutidos. Hay que preferir en estos casos una dieta rica en frutas y verdura, aceites de oliva, canola, o soja, pescados, productos lácteos light y tomar como habito consultar a su medico periódicamente.

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