Los baños de inmersión son muy beneficiosos al momento de tener que recuperar energía, resultan terapéuticos, pero además nos devuelven la vitalidad perdida durante el día. Los grandes aliados de los mismos son los aceites esenciales, que tienen grandes virtudes parecidas en cuidados externos.
Para ellos es conveniente utilizar sustancias hidrosolubles, como aceites de germen de algún cereal ya que esto evita la formación de grasa sobre el agua y que luego se nos pega en la piel, por ello tenemos que cuidar que al comprarlos sean productos determinados para este tipo de actividad, y sean bien suaves para mantener cuidada nuestra piel.
El enebro, las rosas, el geranio y el aloe vera poseen un efecto relajante y calmante, en tanto los cítricos como el limón, la naranja, y el romero se caracterizan por sus propiedades energizantes, que devuelven la vitalidad y resultan estimulantes.
Una opción que te recomendamos que pruebes, es envolver 500 gramos de mejorana en un trozo de tela y la introduzcas en dos litros de agua hirviendo, deja que hierva durante unos 15 minutos, y luego la dejas reposar otros 5 para que suelte todas su propiedades, luego la viertes en el agua de la tina junto a 20 gotas de aceite de sándalo y obtendrás un verdadero resultado relajante y reenergizante en tu cuerpo.
