La granada es un alimento altamente considerado para el cuidado de la piel, ya que la misma posee efectos antioxidantes, que combaten los signos de envejecimiento, y por sus principios bioactivos, además de consumirla se la utiliza en muchos preparados de cosmetología.
La misma tiene un efecto reafirmante, e hidratante sobre la piel, dejándola lisa, tersa y suave, ya que contienen ácido púnico, el cual se encarga en el organismo de la reconstitución de los tejidos cutáneos de forma natural.
El aceite de las semillas de granadas es rico en flavonoides y vitamina E, que son sustancias antioxidantes presentes en casi todos los preparados cosmetológicos que atrapan los radicales libres del tejido de las células frenando en envejecimiento de la misma, hay que recordar que cuanto más madura es la piel, menos capacidad de regenerar los tejidos posee.
Por otro lado los principios antioxidantes del aceite de semillas de granada previenen el envejecimiento precoz, y tienen un efecto antimanchas sobre la piel, que suelen ser producidas por el fotoenvejecimiento.
Se la suele utilizar en muchos cosméticos que cumplen condiciones antiedad, y se los debe aplicar para obtener mejores resultados, sobre la piel húmeda, luego de bañarse o tomar una ducha. Vienen en presentaciones de aceite de granada, cremas que contienen éste aceite y geles para el baño.