Ya hemos visto que los biocosméticos o cosméticos ecológicos y naturales se realizan a base de plantas y productos naturales, que no poseen conservantes ni tratamientos químicos que modifiquen sus propiedades naturales. Por eso os dejamos algunas recomendaciones para utilizarlos correctamente y obtener mejores resultados en los tratamientos.
Para utilizarlos, lo principal es recordar que hay que conservarlos y utilizarlos correctamente y según indicaciones de sus etiquetas, las cuales deben ser leídas y respetadas al pie de la letra como lo indique el fabricante.
Es mejor adquirir aquellos productos envasados al vacío ya que poseen menos riesgos y posibilidades de contaminación y de proliferación de bacterias, dado que no poseen conservantes químicos.
Son productos muy sensibles, por lo tanto se deben conservar lejos de la luz del sol y de las fuentes de calor para no alterarlos ni reducir sus efectos beneficiosos.
Sobre todo hay que tener presente que al no poseer químicos extras, pueden tener otras texturas, o en el caso de los jabones y champú, no hagan suficiente espuma y resulten más espesos o más líquidos que los tradicionales.