Podemos hablar de infección cuando el organismo padece un ataque mediante bacterias o gérmenes nocivos, capaces de desarrollarse y reproducirse produciendo sustancias tóxicas temporales y persistentes que terminan causando enfermedades.
Hay deferentes tipos de infecciones, algunas pueden ser causadas por hongos, bacterias y virus, y en algunos casos el tratamiento con antivirales o antibióticos se hace imprescindible, también la alimentación nos puede ayudar a combatirlas y a prevenirlas.
Para ello debemos tener en cuenta en nuestra dieta alimentos ricos en zinc, que es un mineral muy vigoroso que mantiene en alza nuestro sistema inmunológico, y lo encontramos en mejillones, semillas de calabaza, de girasol, leche, queso y legumbres como así también en los cereales integrales.
Los alimentos ricos en vitamina B6, son muy buenos porque previenen las infecciones, y los ricos en vitamina E que colaboran con el sistema inmunológico. Los alimentos ricos en folatos mejoran mucho la resistencia del organismo y lo encontramos en la levadura de cerveza, perejil, espinacas y brócoli.
Por otro lado el ajo y la cebolla son muy buenos bactericidas y antivirales naturales que no debemos hacer faltar en nuestra dieta, así como tampoco el yogurt que restaura la flora intestinal que suele ser atacada por los antibióticos y algunos otros medicamentos.