La donación de sangre es una de las acciones más elogiables que una persona puede profesar en beneficio de la salud pública y privada. En todo el mundo se celebra el 14 de Junio el Día Mundial del Donante de Sangre, en honor en que el austríaco Kart Landsteiner descubrió los factores sanguíneos en el 1903, que tiene como fin impulsar a más personas a que se transformen en donantes voluntarios de sangre.
La necesidad de sangre y productos sanguíneos seguros es universal y cada año se donan en todo el mundo alrededor de 90 millones de unidades de sangre.
A pesar de esto la demanda de sangre para transfusiones está en aumento y muchos países no pueden hacerle frente. En diversas partes del mundo esto se traduce en un suministro insuficiente para reponer la sangre perdida durante el parto (una de las causas de muerte materna mas significativas) y para tratar la anemia que pone en riesgo la vida de los niños con paludismo o que están mal alimentados.
¿Por qué es necesario donar sangre?
Las donaciones de sangre colaboran a salvar vidas y también a mejorar la salud, es preciso las transfusiones de sangre en las mujeres con complicaciones obstétricas (embarazos ectópicos, hemorragias antes, durante o después del parto, etc.); los niños con anemia grave, provocado por el paludismo o una alimentación mala, las personas con traumatismos graves causados por accidentes y muchos pacientes que se someten a intervenciones quirúrgicas y los enfermos de cáncer.
Es necesaria la sangre para hacer transfusiones periódicas en aquellas personas que padecen enfermedades como la talasemia o la drepanocitosis, asimismo, para la elaboración de diversos productos, como los factores de coagulación para los hemofílicos.
Hay una necesidad continua de donaciones regulares, porque la sangre se puede conservar solamente por un tiempo limitado.
Diversas funciones
La sangre es el regalo más preciado que se puede ofrecer a otro ser humano, el donar sangre puede salvar una vida, o varias si la sangre se separa por componentes glóbulos rojos, plaquetas y plasma, que pueden ser usados para pacientes con enfermedades específicas.
¡La sangre es el único líquido que no se puede comprar en una farmacia, no se fabrica!, ¡doná sangre!. ¡Yo soy donante!, ¿ y tú?.
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