Si alguna vez pensaste en hacerlo y al final no lo hiciste por creer que era algo descabellado y de mal gusto, es momento de reconsiderarlo.
Usar una camiseta debajo, puede ser una gran alternativa para contrastar el estampado de un vestido, usar vestidos de tirantes cuando no hace demasiado calor o simplemente demostrar en tu look la iniciativa de agregar más estilo a tus combinaciones.
A modo de complemento, la camiseta puede ser bastante útil para aquellas a quienes encanta los strapless, pero no los frecuentan mucho porque no les gusta mostrar brazos y hombros. O simplemente, es oportuno para aquellas ocasiones en que crees que no es apropiado llevar al descubierto tanta piel.
Solo hay que tener algunas consideraciones previas a armar el atuendo que planeas integrar con este dúo vestido-camiseta:
- Evita que la segunda sea de un color más intenso que el vestido. Recuerda que es la prenda de importancia secundaria.
- La camiseta tampoco habrá de ser de estampado si el vestido ya lo tiene. Combinar dos estampados distintos en un mismo atuendo es una pésima idea. No le confieres importancia a ninguna prenda, luce desordenado y sin un estilo imperante.
Foto: Because I’m chic
